Con una airada exigencia al presidente Andrés Manuel López Obrador, para que acepte su derrota y no intervenga en la elección, Xóchitl Gálvez solicitó su registro como candidata presidencial por la coalición Fuerza y Corazón por México.
“Señor presidente, le recuerdo que usted ya no estará en la boleta electoral. Si usted es un demócrata, usted debe estar preparado para su derrota” expresó.
“Por respeto a su candidata, a la democracia, al pueblo, saque ya las manos de esta elección”, puntualizó.
Acompañada por simpatizantes que arengaban “Presidenta, presidenta”, recordó que el pasado 18 de febrero, el mandatario federal llamó “corruptos” y “oligarcas” a quienes participaron en la Marcha por la Democracia y en defensa del Instituto Nacional Electoral (INE).
Mientras que la candidata de Morena, Claudia Sheinbaum, los calificó de “falsos” e “hipócritas”.
Gálvez subrayó que en esa multitud del zócalo y de las plazas públicas de al menos seis ciudades de México, había personas que en 2018 votaron por quien ahora los insulta desde Palacio Nacional.
Citó como ejemplo, al recién fallecido Carlos Urzúa, quien al inicio de la administración lopezobradorista creyó en ese proyecto político y luego de volvió uno de sus principales críticos.
Por tanto, remarcó que es normal que en una democracia los ciudadanos piensen distinto y tengan derecho a cambiar de opinión y no solo limitarse a escuchar “el monólogo del tlatoani”.
“Yo quiero un México donde la máxima tribuna política no use su voz para sembrar el odio y la discordia entre las personas y cosechar la violencia”, indicó.
La abanderada de la coalición PAN-PRI-PRD, se dijo preocupada porque “el presidente de la república ha sido un mal perdedor” porque cuando ha perdido una elección señala fraude.
Y hasta cuando gana, acentuó, como en 2018, se queja con amargura de las autoridades que certificaron su triunfo.
Por ello, consideró que el INE y el Tribunal Electoral deben estar atentos de los instintos autoritarios y el activismo partidista del presidente Andrés Manuel López Obrador.
“El INE y el tribunal electoral deben de asumir su responsabilidad histórica frente a un hombre que olvidó la jefatura de Estado para asumir las tareas coyunturales de una jefatura de campaña”, acotó.
Asimismo, advirtió que las fiscalías del país son utilizadas por el gobierno federal para espiar a candidatos y líderes de la oposición.
Mientras que los programas sociales se utilizan para amenazar y chantajear a los millones de legítimos beneficiarios.
Además, los canales de la televisión pública se han convertido en herramientas de propaganda “como en los peores años del viejo presidencialismo”.
Y la tolerancia con el crimen organizado ha derivado en una peligrosa advertencia de los magistrados del Tribunal Electoral.
“Ellos han dicho que la violencia generalizada en la elección puede derivar en la anulación de los comicios”, señaló.
Gálvez expuso que hoy el crimen organizado controla bastos territorios del país y el gobierno no debe permitir que ese control trastoque la decisión de los mexicanos en las urnas, el próximo 2 de junio.
“La fuerza del narcotráfico y la delincuencia es la mayor amenaza a la soberanía del estado mexicano y un riesgo inminente en el funcionamiento de nuestra democracia”, apuntó.
Destacó que 16 aspirantes de todos los partidos políticos han sido asesinados, en México, en lo que va del actual proceso electoral que debería ser motivo de anhelos y no de tragedias.
