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Hacia una histeria colectiva más que al consumo de drogas, apunta la Secretaría de Salud (Sesa) de Tlaxcala, en el caso de la supuesta intoxicación masiva registrada el pasado 14 de febrero dentro de la escuela secundaria número 9, del municipio de Tzompantepec.

Así lo afirmó el titular de la Sesa, Rigoberto Zamudio Meneses, después de asegurar que dos estudios de laboratorio confirmaron que no existía alguna droga en los alimentos y dulces que consumieron los alumnos de la institución.

“No hubo contaminación, no hubo ningún biológico, no hubo nada, sino una histeria colectiva”, sostuvo en entrevista con Hay Gato Encerrado.com.

La histeria colectiva o enfermedad psicógena masiva está asociada a episodios de ansiedad o estrés que pueden desencadenar, en un grupo amplio principalmente de jóvenes, síntomas físicos y biológicos como dolor de cabeza, mareos, vómitos y desmayos.

Quienes lo viven lo atribuyen a las consecuencias de haber consumido alguna toxina o droga; sin embargo, se trata de una enfermedad psicógena masiva con síntomas reales que tienen su origen en estrés y la ansiedad.

La supuesta intoxicación masiva en la secundaria de Tlaxcala ocurrió el pasado 14 de febrero, durante el convivio que organizó para celebrar el Día del Amor y la Amistad.

La tarde noche de ese día, 62 estudiantes manifestaron síntomas como dolor de cabeza, náuseas, dolor de piernas y algunos se desmayaron. La Sesa atendió directamente en su red de hospitales a 29 de ellos; otros en el IMSS y hospitales privados.

En su momento, los padres de familia aseguraron que sus hijos relataron que presentaron los síntomas después de haber consumido unas paletas de caramelo en forma de corazón que obsequió la Sociedad de Alumnos.

De ahí que afirmaron que los dulces contenían alguna droga; incluso, una madre de familia sostuvo que su hija había dado positivo a fentanilo.  

Complementa el tema: Convivio del Amor y la Amistad termina en intoxicación masiva de 62 estudiantes en Tlaxcala

Zamudio Meneses remarcó que, tras la aparente intoxicación masiva, iniciaron una investigación bajo dos hipótesis; la primera sobre la existencia de drogas en lo que consumieron los estudiantes de secundaria, sobre todo en las muestras de unas paletas de hielo y otras de caramelo en forma de corazón.

La segunda hipótesis del caso está enfocada en el desarrollo de una histeria colectiva, que implica un fenómeno sociopsicológico o trastorno psicógeno.

Acentuó que la Sesa y la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Coeprist) ya cuentan con dos exámenes de laboratorio que confirman que los dulces, el agua y que ninguno de los alimentos que consumieron ese día los estudiantes, contenía alguna sustancia estupefaciente.

Rigoberto Zamudio Meneses, secretario de Salud de Tlaxcala.

Precisó que los exámenes de laboratorio fueron para buscar indicios de mariguana, cocaína, fentanilo y éxtasis.

“No encontramos ningún indicio de esas sustancias. Las muestras que se recabaron en el IMSS también fueron negativas”, asentó.

El funcionario añadió que, una vez descartada la existencia de drogas, investigan una histeria colectiva, padecimiento del que ya se tienen antecedentes en México, en estados como Veracruz y el Estado de México; de ahí que los estudiantes también fueron evaluados por áreas de psiquiatría.

“Lo más probable es que sea una histeria colectiva, pero veremos el resultado final”, apuntó.

Entre 2006 y 2007, el Hospital Infantil de México diagnosticó una histeria colectiva en el internado “Villa de las niñas”, que dirigía la congregación religiosa de Corea del Sur “Hermanas de María”, en Chalco, Estado de México.

Un total de 600 niñas sufrieron histeria colectiva; la manifestaron con síntomas como atrofia muscular y mareos. Los especialistas atribuyeron el padecimiento a las condiciones traumáticas y de maltrato a las que estaban sometidas.

Una histeria colectiva o histeria en masa o de grupo, es un fenómeno sociopsicológico que consiste en la manifestación de los mismos síntomas por más de una persona de un mismo grupo y de manera simultánea.

Generalmente, empieza cuando un individuo se dice enfermo tras un episodio de estrés y muestra síntomas como náuseas, debilidad muscular, ataques de pánico o dolores de cabeza. Al decirse enfermo, otros individuos del mismo grupo empiezan a manifestar síntomas similares.

El secretario de Salud de Tlaxcala insistió en que en la búsqueda de una explicación de lo que ocurrió en la secundaria, todo apunta hacia una “histeria colectiva”.

Reiteró que, hasta el momento, no ha sido detectada ninguna droga en los análisis clínicos aplicados a los estudiantes, y que si algún padre de familia cuenta con un diagnóstico que diga lo contrario es porque, quizás, su hijo o hija sí consume alguna droga.

Y como existe una investigación judicial por el caso, a cargo de la procuraduría local, subrayó que los padres o las madres que aseguren que sus hijos dieron positivo a alguna droga, deberán exhibir físicamente los documentos de laboratorio.

“Puede salir positivo una persona a fentanilo y eso no quiere decir que todos los demás hayan estado consumiendo”, acotó.

Explicó que una intoxicación por fentanilo provoca exaltación y alucinaciones, síntomas que no presentaron los estudiantes.

Agregó que, aunque ya fue descartada alguna droga, todavía están en espera de un tercer examen de laboratorio, el cual es para detectar Benceno, Tolueno, Etilbenceno o Xileno (BTEX), así como Hidrocarburo Aromático Policíclico (PAH), que son productos derivados del petróleo que pueden encontrarse en envolturas, insecticidas o aromatizantes y que producen efectos nocivos sobre el sistema nervioso central cuando una persona consume alimentos contaminados por esas sustancias.

“Hasta en la basura buscaron”

El director de la secundaria, Héctor García, sostuvo que con tal de encontrar qué fue lo que originó la intoxicación masiva entre los estudiantes, los representantes de la Comisión Estatal Contra Riesgos Sanitarios (Coeprist), “hasta en la basura buscaron”.

Reunido en la plaza cívica de la institución, donde padres de familia le exigieron una explicación de lo ocurrido, detalló que la dependencia local tomó muestras de diferentes dulces, de los alimentos que ofreció la cafetería escolar, de los residuos que había en los cestos de basura y del agua.

Señaló que los resultados oficiales de las pruebas rápidas dieron negativo a alguna droga; por tanto, llamó a los padres de familia a no criminalizar a ningún alumno o alumna.

Esto, debido a que algunos padres de familia exigían que fueran detenidos los alumnos y las alumnas que distribuyeron dulces entre sus compañeros, ante la sospecha de que estos fueron la causa de la intoxicación colectiva.

En una entrevista posterior a ese encuentro, García puntualizó que los informes de la Secretaría de Salud (Sesa) y los de la Coeprist son los oficiales, no cualquier otra información que circule en otros canales como las redes sociales.

“Hasta el momento yo no cuento con ningún examen que me hayan dado a conocer, físicamente, de que hayan resultado positivos, lo que sí tengo son resultados negativos que me han mostrado y que me han enviado”, indicó.

Advierte CEDH sobre criminalización de estudiantes

El directivo aseveró que la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), al conocer del caso, actuó como instancia observadora y, a través de su personal, advirtió sobre la protección de los derechos humanos de los estudiantes, sobre todo, porque son menores de edad.

Subrayó que no es posible pensar en la detención de los alumnos o alumnas, como lo solicitaban algunos padres de familia porque implicaría una violación a sus derechos.

“Nadie es culpable hasta que se demuestre lo contrario. Sería algo completamente erróneo señalar a algún alumno o señalar a cualquier otra persona de que haya hecho, distribuido o dado algo cuando no se tiene una prueba”, expresó.

“Sería discriminatorio, algo ilógico hacer algo en contra de nuestros alumnos cuando no tenemos la evidencia”, agregó.

El también docente, reiteró que los primeros informes de la Sesa y la Coeprist arrojan un resultado negativo a cualquier narcótico.

“Esos son los resultados oficiales y no tendría yo argumento para contradecirlos”, acotó.