Con una marcha, ejidatarios de Baja California Sur expresaron su rechazo contra las declaratorias como Área Natural Protegida (ANP) que ha emitido el Gobierno federal para sus ejidos; exigieron un alto a los decretos.
Marely Higuera, presidenta del ejido La Purísima, expuso que los más de 90 predios que componen el ejido ya tienen dueño, entonces por qué declararlos como ANPs.
Detalló que los afectados pertenecen a los ejidos de La Purísima, Los Naranjos, San José de la Noria, Alfredo V. Bonfil, Tepentú, Santo Domingo, Cadegé, Josefa Ortiz de Domínguez, La Poza, y Emiliano Zapata 2.
En afán de reclamar la propiedad de sus tierras, llegaron con mantas y pancartas, a la explanada del Palacio de Gobierno, donde pidieron al mandatario estatal, su intervención para evitar la creación del Área Natural Protegida en la sierra de la Giganta y Guadalupe.
Demandaron respeto ante los adjetivos que, aseguran, utiliza el gobernador para referirse a los propietarios de las tierras, y le recordaron que su función es defender y atender al pueblo y no darle la espalda.
Por ello, remarcaron que no son ejidatarios “ni de primera, ni de segunda”, como lo han hecho ver autoridades estatales, sino simplemente son personas que defienden su territorio del saqueo porque no han sido tomados en cuenta en las decisiones del Gobierno federal.