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La Secretaría de Salud de Tlaxcala (Sesa) declaró una alerta epidemiológica en todo el estado debido a un “incremento inusual” de casos del Síndrome Guillain Barré (SGB), una extraña enfermedad que puede resultar en pérdida de movilidad y parálisis en los afectados.

Con el fin de identificar posibles causas, la Sesa investiga el historial de vacunación contra la COVID-19 e influenza, la posibilidad de consumo de carne de pollo, así como antecedentes de infecciones gastrointestinales y respiratorias en los pacientes que ya ha confirmado con esa enfermedad.

A través de un comunicado oficial, la dependencia informó que, hasta la semana epidemiológica nueve, que concluyó el pasado 2 de marzo del año en curso, se han detectado 18 casos de SGB, 12 de los cuales corresponden a personas mayores de 15 años y el resto a menores de edad.

La mayoría de los casos se han registrado en pacientes procedentes de los municipios de Santa Cruz Tlaxcala, Calpulalpan y Tlaxcala, sin que se haya reportado ninguna defunción hasta el momento.

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El SGB es una enfermedad poco común en la cual el sistema inmunológico ataca los nervios, causando debilitamiento muscular y, en consecuencia, pérdida de movilidad en el paciente.

Los síntomas iniciales suelen incluir debilidad y hormigueo en manos y pies que progresa rápidamente hasta una parálisis generalizada en el paciente.

Según investigaciones médicas, la causa exacta del Síndrome Guillain Barré aún no se identifica completamente, aunque se ha observado que dos tercios de los pacientes reportan haber experimentado síntomas de infección en las semanas previas, incluyendo infecciones respiratorias, gastrointestinales y virus como el Zika.

La alerta epidemiológica emitida en Tlaxcala indica que el 72 por ciento de los pacientes confirmados presentaron una progresión ascendente de parálisis con manifestaciones neurológicas.

De los casos confirmados, el 33 por ciento mostró presencia de la bacteria Campylobacter jejuni, la cual causa infecciones gastrointestinales, lo que ha llevado a investigaciones más profundas sobre esta asociación.

En respuesta a esta situación de salud pública, se han establecido medidas de prevención y control en toda la entidad, incluyendo la capacitación del personal médico en la detección y manejo del SGB asociado a Campylobacter jejuni.

La Sesa recomendó hace un muestreo para detectar cloro residual en las localidades de donde son originarios los pacientes con el raro síndrome.

A la población en general le exhortó a reforzar las prácticas de higiene, especialmente en el manejo y desinfección de alimentos, con énfasis en productos cárnicos.