Hasta 2020, la primera campaña antifraude cibernético en México
Hasta 2020, la primera campaña antifraude cibernético en México
el fraude cibernético ocupa el primer lugar de incidencias reportadas en Atención Ciudadana de la GN.
De 2014 a 2019, otras 518 personas, siete empresas y una escuela primaria, además de Jesús, David, Rosa, Escribano, Isaac, Norberto y Edgar, los protagonistas de esta investigación, cayeron y son víctimas, en México, del fraude cibernético transnacional operado con Internet con el falso remate de flotillas y portales electrónicos ficticios. Bastó un clic para que todos ellos cayeran en la estafa.
Sin embargo, el primer antecedente de una campaña antifraude cibernético, implementada por el Gobierno mexicano, ocurrió hasta 2020; es decir, con al menos seis años de ventaja para los ciberdelincuentes y los mismos años de rezago para el Gobierno mexicano.
Por:
Ana Laura Vásquez
Con un rezago y con una involución en la documentación del fraude cibernético, el Gobierno mexicano, a través de la Guardia Nacional (GN) y las 43 unidades de Policía Cibernética, que se articulan como parte del Sistema Nacional de Seguridad Pública en las 32 entidades federativas, implementó la primera Campaña Nacional Antifraude Cibernético en México que inició el 01 de noviembre de 2020 y concluyó el 31 de enero de 2021.
En respuesta a una solicitud de acceso a la información pública presentada para esta investigación, la GN informó que, en el marco de la Sexta Semana Nacional de Ciberseguridad, celebrada el 07 de octubre de 2020, se llevó a cabo la primera sesión ordinaria del Comité de Ciberseguridad que preside la misma institución desde la Dirección General Científica; y entre los acuerdos de esa plenaria se estableció como “acción prioritaria” la primera campaña nacional antifraude cibernético, después de analizar el comportamiento de este delito.
Según la GN, el fraude cibernético ocupaba, hasta ese año, el primer lugar de las incidencias reportadas en su área de Atención Ciudadana. En 2018; por ejemplo, recibió 4 mil 717 reportes por fraude cibernético; en 2019, un total de 3 mil 873; y para 2020 la cifra creció a 5 mil 426.
En el periodo de 2018 a 2020, el 94.6 por ciento de los incidentes por fraude cibernético estuvieron relacionados con la venta o compra de bienes y servicios en el comercio electrónico.
A partir de esa estadística surgió la primera Campaña Nacional Antifraude Cibernético, y cada uno de los estados mexicanos, con base en las incidencias de ese delito, emprendió acciones preventivas en materia de ciberseguridad para concienciar a la ciudadanía sobre la estrategias de engaño que usan los ciberdelincuentes, como la venta de productos, insumos o medicamentos relacionados con la enfermedad covid-19, el registro a supuestos programas sociales para obtener beneficios económicos y la venta de autos en modalidad de flotillas.
Como parte de las acciones de esa campaña, las autoridades gestionaron la baja de 817 portales electrónicos fraudulentos.
La GN justificó, en ese entonces, que recibe reportes a los que denomina “denuncia ciudadana”, identificados y catalogados únicamente para efectos estadísticos según la relatoría de los hechos, pero no los califica en ninguna conducta delictiva ni inicia una investigación porque eso le corresponde al agente del ministerio público y órganos jurisdiccionales.
Para conocer estadísticas más precisas respecto del fraude cibernético en ese año, recomendó remitir solicitudes de acceso a la información pública a la Fiscalía General de la República (FGR) y a las fiscalías locales.
Y fue en esas instituciones donde se detectó, de acuerdo con las respuestas obtenidas para esta investigación, una involución respecto a la estadística como evidencia del fraude cibernético, específicamente aquel cometido con portales electrónicos ficticios para el falso remate de flotillas.
En la primera etapa de esta investigación fue posible documentar, con solicitudes de acceso a la información pública, que, del 01 de enero de 2014 al 30 de enero, pero de 2019, las fiscalías locales de México registraron 523 denuncias por fraude cibernético que representaron para los ciberdelincuentes una ganancia de por lo menos 57 millones 268 mil 940 pesos.
En una segunda etapa de esta investigación, también con el apoyo de solicitudes de acceso a la información pública, a través de la PNT, y en el marco de la primera Campaña Nacional Antifraude Cibernético en México, las fiscalías del país negaron la información con el argumento de que reportan el fraude en general y sin especificaciones al Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), que se trata de información inexistente y que no están obligados a generarla para responder al solicitante de información.
Lo anterior representa una involución, que perjudica el derecho de acceso a la información pública, porque en 2019 algunas fiscalías sí respondieron a solicitudes sobre el fraude cibernético, pero de 2020 a 2021, ya con una campaña contra este delito, la mayoría de ellas rechazaron proporcionar los datos.
Con ello impiden la generación de evidencia respecto del comportamiento del fraude cibernético, que sería útil para el diseño de política pública y la toma de decisiones en materia de ciberseguridad y combate a la ciberdelincuencia.
En la segunda fase de esta investigación, solo los estados de Coahuila, Durango, Nuevo León, Sonora y Tamaulipas proporcionaron información sobre las denuncias que recibieron por el fraude cibernético operado con Internet, falsos portales electrónicos y el engaño del supuesto remate de flotillas.
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Sobre solicitudes de acceso a la información
- Después de la primera Campaña Nacional Antifraude Cibernético en México, solo los estados de Coahuila, Durango, Nuevo León, Sonora y Tamaulipas, en respuesta a solicitudes de acceso a la información pública, proporcionaron información sobre las denuncias que recibieron por el delito de fraude cibernético operado con Internet, falsos portales electrónicos y el engaño del supuesto remate de flotillas.
Durango recibió dos denuncias en agravio de dos varones, por un daño patrimonial derivado del fraude cibernético, de 118 mil y 72 mil 500 pesos. Nuevo León recibió tres denuncias por la misma modalidad de fraude, aunque no detalló el número de víctimas ni el monto defraudado; lo mismo que Sonora, que reportó un caso.
Tamaulipas registró 5 denuncias sobre fraudes por remates de flotillas de vehículos ofertados en “mercados electrónicos, perfiles de redes sociales y portales electrónicos”.
La Fiscalía General del Estado de Coahuila consignó 18 denuncias por fraude cibernético de “cuantía media” y “cuantía mayor”, operado con Internet y con portales electrónicos que utilizaron la imagen corporativa de Volkswagen, Coca Cola-FEMSA, Bimbo, Pepsico, Aerovías de México, Agencia Toyota, CarAutomotriz, Grupo Autofin Monterrey, Met MEX Peñoles, Aeropuerto Monterrey y de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
El daño patrimonial por esas 18 denuncias fue por un monto global de 2 millones 624 mil 400 pesos, en agravio de 15 varones y dos mujeres que cayeron en la estafa, a pesar de que esta fiscalía, con apoyo de la Policía Cibernética de esa entidad, difunde en Facebook recomendaciones para que la ciudadanía esté atenta y “no sea víctima de este tipo de delitos o cualquier otro delito que pueda afectar al patrimonio”.
¿Dónde denunciar un fraude cibernético en México?
La Guardia Nacional exhorta a la ciudadanía a reportar todo abuso o delito cibernético al número 088, disponible las 24 horas del día.
Asimismo, a la cuenta de X @CNAC_ GN o al correo electrónico: cert-mx@sspc.gob.mx
Fraude Cibernético
Según la Guardia Nacional, hasta finales de 2023 las modalidades de fraude cibernético más comunes en México son:
- Suscripciones gratuitas, que pueden contener códigos maliciosos al recibir sus boletines.
- Comunicados falsos, con el objetivo de confundir a los usuarios.
- Correos alarmantes para obtener información personal y financiera.
- Servicios gratuitos (smishing) en el cual ofrecen premios al entrar a un link fraudulento.
- Correos Spam de desconocidos con archivos maliciosos.
- Ofertas atractivas, que suelen ser irreales y pueden derivar en robos.
- Páginas apócrifas (phishing) donde solicitan donativos o información.
